LA EDAD DE LA VIDA
Este cuento lo he escrito yo, espero que os guste.
Me queda
un mes de vida.
Dia 30-
Me levanto con un terrible dolor de huesos. Me tomo mi chocolate con galletas
de dinosaurios y me pongo mi bonito pañuelo de pirata.
Dia 29-
Mi hermana me ha quitado el estuche de colores. Siempre discuto con ella por lo
mismo. Me tomo mis aspirinas para evitar trombos
Día 28-
Es el cumpleaños de mi amiga Isabel. Cumple 14 años. Le he hecho un colgante
con cuentas de colores que me ha dado mamá.
Me dan
los resultados del análisis de sangre. Todo parece ir según lo planeado.
Día
27-25- Estoy en la cama agotada. No puedo moverme. Vienen mis amigos y me
cuentan lo que han hecho hoy en el colegio. Hemos jugado a las muñecas Elena y
yo.
No tengo
miedo….
Día 24-
Hemos ido al zoo. Le he dado de comer a las jirafas. La artrosis casi no me
deja moverme. No puedo más.
Día 23-
Sara me ha invitado a su casa. Su hermana tiene un pelo muy bonito. Tengo
envidia por que yo solo luzco mi cabeza rapada. Tengo la tensión muy alta, así
que me han dado más medicinas.
Día 22-
Se me ha caído mi tercer diente. He tenido que ir al médico para una revisión.
Día
21-19- El ratoncito Pérez me ha traído una muñeca. Hoy hemos ido a la piscina. Estoy
cansada de esto.
Día 18-
Papá ha vuelto del viaje. Espero que venga contento. Tengo ganas de jugar.
Hemos hablado con el médico y cree que todo irá según lo previsto.
Mamá lo
está pasando muy mal…
Día 17-
Le he hecho un dibujo al tío. Le ha gustado mucho, y nos ha invitado a comer a
su casa. La diabetes me está dando muchos problemas. Tengo el azúcar muy bajo.
Día 16-
Hemos estado bailando con mi amiga Ana. Nos lo hemos pasado genial. Noto que
cada día la piel se me pone más fina.
Día
15-10- Ayer fuimos al cine a ver Tadeo
Jones. Me ha gustado mucho la peli.
Hoy
estoy malita. He cogido un virus. El médico dice que no es grave, pero me han
trasladado al hospital.
Día 9-
No tengo fuerzas para nada. Tengo las defensas muy bajas.
Día 8-
Papá quiere que salgamos a jugar al parque. Me ha comprado un helado.
Tengo
que ser valiente…
Día 7-
En casa todos están pendientes de mí. Hoy estreno vestido nuevo. Me mareo
mucho. El cuerpo me está fallando.
Día 6-
Hace mucho calor, así que nos hemos quedado en casa jugando al Trivial. Empiezo
a tener síntomas.
Día 5-4-
He ido a un espectáculo de magia. Me he quedado muy sorprendida. Estoy harta de
tanta pastilla.
Día 3-
Hemos jugado al pilla-pilla con Carlos, María y Dani.
Comienza
la cuenta atrás…
Progeria:
enfermedad incurable y mortal que consiste en el envejecimiento rápido de las personas. Naces siendo prácticamente un abuelo. No tienes pelo, no tienes
pestañas y no
tienes cejas. Cada año que cumple envejeces de 5 a 10 años. Y mueres siendo un adolescente. Esta
enfermedad afecta a 1 de cada 8.000.000 de personas.
Del
diario de Sonia:
Nací
el 5 de marzo de 1999. Era un bebé
normal. No tenía
ningún
síntoma raro. Pero a las dos semanas
enfermé.
Ahí
empezó
todo. Me detectaron Progeria. Mis padres no sabían
que hacer, investigaron todo tipo de información
para poder curarme, pero nada funcionó.
Hablaron con médicos
de todo el mundo, Bélgica,
Estados Unidos, Australia, Holanda, pero solo consiguieron ponerle nombre.
El resto de mi vida
viví
como una niña
normal. Pero lo más
duro llegó
después.
Cuando sufrí
una embolia en el cerebro, lo que acabó
en un accidente cerebrovascular. Mis padres me llevaron al hospital corriendo.
Y los médicos
lograron salvarme. Pasé
un mes y medio ingresada. Y cuando salí,
todo cambió.
Prácticamente
no podía
hacer nada. Y cada dos semanas tenía
que ir al médico
para una revisión
rutinaria.
Al cumplir los 12 años
volví
a caer enferma, está
vez me detectaron artrosis. A partir de ese momento empecé
a ir en silla de ruedas. Cada vez me encontraba más
cansada, ya no tenía
ganas de hacer nada. Pero lo que de verdad marcó
ese año
fue la visita al médico
el día
7 de octubre de 2011. Nadie nos imaginábamos
que el médico
nos diría
eso. Pero lo hizo. Nos dijo el año
de mi muerte. Ya sabíamos
que la esperanza de vida teniendo Progeria no supera apenas los 20 años,
pero me derrumbé.
Según
el médico
moriría
a los 13 años.
Entonces todo mi mundo se vino abajo. Sufrí
demasiado. Y mis padres también.
No sabía
que hacer. Todo en lo que creía,
dejo de existir. Pero tuve que salir adelante.
Actualmente tengo 14
años. Y me he dado cuenta de que la vida
no es como te la imaginas. Pero soy muy feliz. Tengo una familia que me quiere
y me cuida, amigos que están
ahí
para todo, y sobre todo tengo mucha esperanza. Tengo esperanza en que algún
día pueda llegar a ser normal. Porque
ahora creo que todo es posible. Y si no lo es, no vale la pena luchar por ello.
Así
que solo me queda decir gracias.